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06/03/2003 |
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Gl�ria Abad, Meritxell T�llez y Pere Sobrerroca forman parte de la comunidad de Sant Egidi. Ayer hicieron ayuno y finalizaron la jornada con una plegaria en la iglesia de los Sants Just i Pastor. Esta comunidad de laicos se re�ne cada tarde para rezar. �La jornada la hemos vivido, cada uno, a su manera, ya que se trata de una opci�n personal�, explic� Meritxell anoche. �Este ayuno es un signo de paz en un ambiente de violencia y de miedo; hay temor al enfrentamiento con el otro, sobre todo con el que es distinto, como el extranjero�, a�adi� Gl�ria. Por eso, Meritxell cree que �debemos ponernos l�mites�. En su opini�n, la Cuaresma �es tambi�n un momento para decir no a la arrogancia que podemos llevar dentro�. Lo que estos tres j�venes vivieron ayer tiene mucho que ver con el d�a a d�a, especialmente con el compromiso con los pobres, que es una de las opciones de la comunidad. Gl�ria subraya: �Estamos acostumbrados a buscar la felicidad en las cosas, en la abundancia, cuando realmente la encontramos en las personas�, y, desde la perspectiva, �el ayuno es una manera de vivir la solidaridad con el que sufre, una forma de abrir los ojos al dolor del mundo, en todas sus formas�. El di�logo entre las personas y las religiones como forma de acci�n contra el conflicto. �sta es otra forma de acci�n contra el conflicto. �sta es otra de las apuestas de la comunidad de Sant Egidi. Pere sostiene que �el Papa tiene una gran intuici�n en este tema� y que �la Iglesia defiende esta forma de actuar con firmeza�, como puede verse en el conflicto de Iraq. En su opini�n y parafraseando a Andrea Riccardi, el fundador de Sant Egidi, �parece que hay voluntad por instrumentalizar las religiones para hacer la guerra, cuando, de hecho, no hay guerras santas, s�lo la paz es santa�.
Oscar Munoz
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