Comunità di S.Egidio


 

23/10/2003

Manel Alonso ha estado este verano en Albania con la Comunidad de San Egidio
�Albania es el paradigma de la cohabitaci�n interreligiosa�
La Comunidad de San Egidio est� presente en Albania desde hace m�s de 10 a�os. A lo largo de este tiempo se han llevado a cabo muchos proyectos asistenciales, sobre todo educativos y sanitarios, adem�s de lanzar un mensaje de paz y esperanza que poco a poco va calando en el coraz�n de muchos albaneses. El �producto estrella� exportado por San Egidio al pa�s de las �guilas han sido las escuelas de la paz, presentes en m�s de veinte pueblos y ciudades del pa�s, y donde desde hace cinco veranos acude Manel Alonso junto con otros miembros de la comunidad de Barcelona.

 


- �Qu� son exactamente las escuelas de la paz?

- A ra�z de la guerra de Kosovo, medio mill�n de personas se refugiaron en el norte de Albania. En los campos de refugiados que por entonces se crearon, la Comunidad de San Egidio constituy� las llamadas escuelas de la paz, donde los ni�os pod�an seguir los ritmos de escolarizaci�n y a la vez recibir educaci�n por la paz y el medio ambiente.

Aunque la guerra se termin� hace algunos a�os, las escuelas han seguido hasta ahora con el mismo esp�ritu: que los ni�os que no pueden ir a la escuela puedan tener una m�nima escolarizaci�n. Desgraciadamente todav�a hay refugiados que no han podido regresar a Kosovo porque lo han perdido todo, y tambi�n hay muchos ni�os albaneses que, por las razones que sea, no pueden ir a la escuela normalizada.


- �Por qu� es tan importante la educaci�n por la paz en Albania?

- El trabajo y la educaci�n por la paz es importante para todo el mundo, sean ni�os, adolescentes, adultos o ancianos. En este tema no tenemos que detenernos jam�s. En el caso de Albania es especialmente importante por tres motivos. El primero, porque durante m�s de 40 a�os han vivido un r�gimen totalitario, que les aisl� del resto del mundo, con una cultura del miedo y de la violencia. El segundo es porque ha sido un pueblo tocado siempre por las guerras, la m�s reciente, la guerra de Kosovo. La cultura de la guerra se mastica en el pueblo albano. Y la tercera raz�n es porque todav�a son herederos de una cultura ancestral que es la cultura de la venganza. Yo he conocido este a�o a una familia que durante ocho generaciones no ha salido de casa porque estaba amenazada por otra familia.


- Precisamente San Egidio es la ant�tesis de esta cultura.

- Despu�s de tanto o�r hablar de la guerra, de la violencia, del malestar� hablar de la paz es tambi�n hablar de bienestar y esperanza para ellos y para su pueblo. As� han podido ver un mayor horizonte para su vida. Y es que precisamente �ste es otro problema, no ven futuro� y emigran.


- �Pero existen razones para la esperanza en Albania?

- Actualmente Albania va 100 a�os atrasada con respecto a nosotros, y necesita tiempo. Albania tiene futuro, pero hay que construirlo poco a poco y con paciencia. Yo la veo renacer cada a�o que voy. Desde 1999 el pa�s ha sufrido un cambio espectacular. La primera vez que fuimos, las carreteras actuales eran un camino de cabras. Este a�o ya hab�a autopistas y la ciudad empieza a tener cuerpo de ciudad, con escuelas, hospitales, ambulatorios, con m�s color.


- Y la gente, �c�mo es?

- Los primeros a�os la gente estaba triste. Era muy dif�cil ver a un alban�s riendo. Era todo un mundo gris, y sorprend�a mucho. Ahora, en cambio, puedes encontrar a gente contenta, oyes m�sica y ves a la gente que baila. Los ni�os van contentos a la escuela� Se ha hecho un camino positivo. Ahora hay que mantenerlo y hay que ayudarles m�s. Incluso, desde hace unos a�os hay Comunidad de San Egidio aut�ctona, formada por gente muy joven. Eso tiene mucho m�rito teniendo en cuenta la brutal persecuci�n religiosa vivida durante el r�gimen comunista.


- Adem�s de la implicaci�n social, �qu� m�s hace la comunidad en Albania?

- Las oraciones de la Comunidad de San Egidio son particularmente concurridas. Hemos descubierto que rezar se ha convertido en la necesidad de mucha gen-te, sobre todo anciana, que antes del r�gimen comunista hab�a sido muy creyente. Gente que espera, en la oraci�n, un mundo mejor y un mundo en paz. Este sue�o se comparte con la Iglesia ortodoxa y con los musulmanes, las tres religiones principales del pa�s. Todo el mundo est� convencido de que la paz es algo que viene de lo alto, de Dios. Albania se convierte en un paradigma de la cohabitaci�n entre religiones. Siempre ha habido respeto, han solucionado sus problemas, y lo m�s importante, las tres ruegan por el don de la paz.

Samuel Guti�rrez