Comunità di S.Egidio


 

EFE

30/11/2003


Coliseo y edificios 120 ciudades se iluminan contra pena muerte

 

Roma, 30 nov (EFE).- El Coliseo de Roma y edificios de otras 120 ciudades del mundo, entre ellas Madrid, Barcelona, Buenos Aires, Santiago de Chile, Quito y Bogota, se iluminaron hoy contra la vigencia de la pena de muerte en muchos paises.

Con este acto simbolico finalizo la Jornada Internacional para la abolicion de la pena capital promovida por la Comunidad de San Egido, organizacion religiosa mediadora en conflictos internacionales, y el Ayuntamiento de Roma.

El famoso anfiteatro Flavio se ilumino en presencia de diversos premios Nobel de la Paz, que estos dias han participado en la capital italiana en una reunion sobre las emergencias en el mundo.

Casi al unisono se hizo tambien la luz en la Torre del Municipio de Berlin, la Plaza de la Villa de Madrid, la Campana de la Paz de Quito, el Palacio de la Moneda de Santiago de Chile, el Obelisco de la Plaza de la Republica de Buenos Aires o Los Columbarios del cementerio central de Bogota.

Tambien Barcelona, Florencia, Venecia, Viena, Copenhague o Estocolmo se convirtieron en "ciudades por la vida", al igual que Dalas y Austin, en Texas, que tiene el record de ejecuciones en Estados Unidos.

Los Premios Nobel reunidos en Roma, entre ellos el Dalai Lama, el primer ministro israeli Simon Peres, el costarricense Oscar Arias y el ultimo presidente de la URSS, Mijail Gorbachov, firmaron una declaracion conjunta contra la pena de muerte.

"La vida -senala el documento- puede ser defendida solo con la vida, nunca con la muerte, porque la pena de muerte humilla de la misma manera a los que son ejecutados que a los Estados que les ejecutan".

Ochenta y seis paises siguen recurriendo de forma habitual o esporadica a la pena de muerte, entre ellos China, India, Japon, Arabia Saudi, Iran, Pakistan, la Republica Democratica del Congo o EEUU, donde esta vigente en 38 estados, de los que 14 la practican de forma regular.

Organizaciones de 150 paises entregaran proximamente cinco millones de firmas al secretario general de la ONU, Kofi Annan, para pedir una moratoria sobre la pena de muerte en todo el mundo.