Los niños residentes en el campo de Piemonte de Mirandola, uno de los municipios más afectados por el terremoto de mayo, han conocido a nuevos amigos con los que afrontar la vida lejos de casa.

Un grupo de jóvenes de la Comunidad de Sant’Egidio de Roma, trasladados a Módena durante la última semana de julio, ha permitido que unos 30 niños participaran en actividades y juegos inspirados en el programa de las escuelas de la paz.

En los 5 campos habilitados por protección civil en Mirandola quedan todavía muchas familias, sobre todo magrebíes y chinas, cuyas viviendas quedaron gravemente afectadas por los sismos del pasado mayo, y con ellos un considerable número de menores.

Con juegos, actividades y mucha amistad, fruto de una experiencia de cuarenta años de la Comunidad junto a los menores, los jóvenes trabajaron para crear un lugar de amistad con todos, esforzándose por soñar y construir un futuro más sereno, también para los niños de Emilia, afectados por el terremoto.