Curar el SIDA 
EN �FRICA

La terapia antiretroviral  en Mozambique

DREAM: �Por qu�?

DREAM (Drug Resource Enhancement against AIDS in Mozambique) es un programa de control, prevenci�n, tratamiento, en otras palabras, de lucha global, contra la infecci�n de HIV en Mozambique.

DREAM refleja la manera de sentir de Sant'Egidio

Para la Comunidad de Sant'Egidio el valor de la persona y de toda vida es un punto central. Durante muchos a�os una estrategia exclusivamente preventiva ha sido el paradigma de todas las grandes agencias internacionales - y de la comunidad cient�fica - para el ataque al SIDA en los pa�ses en v�as de desarrollo. Esta estrategia ha mostrado sus l�mites: decenas de millones de africanos seropositivos y una curva de la epidemia dram�ticamente en ascenso al menos hasta el 2010, imponen un esfuerzo extraordinario para recuperar el tiempo perdido y a�adir a la prevenci�n, finalmente, la terapia. Quien sufre el fracaso de la estrategia de lucha contra el SIDA en el Sur del mundo es la desaparici�n de gran parte del �frica de hoy y de ma�ana. El programa nace, pues, con el objetivo de volver a reunir prevenci�n y terapia, con el convencimiento que es necesario salvar adem�s de prevenir, ganando para el mayor n�mero posible de personas un nuevo tiempo a la vida.

DREAM es concebido gracias a la excelencia

Excelencia de las curas y del diagn�stico, de la organizaci�n y de la informatizaci�n. Por eso, como lo ilustrar�n las p�ginas siguientes, DREAM repropone el estado del arte de los est�ndares occidentales, utilizando la valoraci�n de la carga viral, o introduciendo la Highly Active Anti-Retroviral Therapy (HAART), el actual patr�n de oro en el tratamiento de la infecci�n de HIV, para todos los pacientes que lo necesitan. Para la Comunidad de Sant'Egidio las personas no son nunca simples "emergencias", cuerpos que vestir, llagas que curar, bocas que dar de comer: siempre son personas, son amigos. Por eso nos movemos seg�n aquel sencillo y antiguo secreto que recomienda hacer a los dem�s lo que nos gustar�a que nos hiciesen. �Qui�n no quiere para s� mismo la excelencia? Este enfoque es muy eficaz. Es una gran motivaci�n para el personal involucrado, consigue la m�xima colaboraci�n de los pacientes, hace que los mismos pacientes sean promotores de conocimiento en el ambiente que les rodea, abate la dispersi�n y la interrupci�n de la terapia en curso, alza el nivel cualitativo de las prestaciones ofrecidas. El minimalismo tantas veces propuesto en temas de ayuda internacional y de cooperaci�n corre el riesgo, en el tema del SIDA, de conducir a consecuencias peligrosas sino letales en un ambiente ya expuesto a demasiadas debilidades y ante una complejidad que en su ra�z es refractaria a cualquier enfoque sectorial o reductor.

DREAM se funda en la asociaci�n

La Comunidad de Sant'Egidio no desempe�a el papel del donante distra�do que, por su propiedad, concede sus propios fondos y deja hacer, confiando en los balances financieros. No se trata de paternalismo sino de responsabilidad. Poder trabajar juntos es una chance m�s. Trabajar juntos significa proporcionar todos los medios necesarios para alcanzar los objetivos, en colaboraci�n y en el respeto del marco institucional local. As�, mientras centenares de miembros de la Comunidad se dedican a promocionar el proyecto en Occidente, m�s de 120 voluntarios calificados -m�dicos, enfermeros, t�cnicos de laboratorio, inform�ticos, educadores, administrativos- se turnan, con superposici�n y transferencia directa de conocimientos, durante todo el a�o, para sostener al personal local comprometido en el programa.

DREAM es un programa participativo

Nace s�lo en los pa�ses m�s industrializados del mundo, pero tiene una base social muy s�lida en Mozambique: en el pa�s, en m�s de 60 comunidades de Sant'Egidio, cinco mil j�venes y adultos est�n comprometidos al lado de los pobres. Todo el mundo, en efecto, puede ayudar: nadie es tan pobre para no poder ayudar a alguien m�s pobre que �l. Estas comunidades participan activamente en el programa en dos sectores estrat�gicos: la educaci�n sanitaria y el apoyo nutricional. Decenas de miles de mozambique�os se benefician establemente, en las zonas m�s deprimidas, de esta actividad cotidiana. Pero DREAM tambi�n est� abierto a la participaci�n de quien vive en Occidente: si Institutos de car�cter cient�fico y diferentes realidades del mundo industrial y econ�mico son hoy partners estables del programa, ofreciendo sus recursos t�cnicos, cient�ficos y econ�micos, much�simos ciudadanos particulares participan en el programa recibiendo una informaci�n puntual y ofreciendo su apoyo de muchas formas.

DREAM est� modulado por un r�pido scaling-up

La excelencia de las prestaciones y los reducidos recursos econ�micos no han representado un l�mite a la posibilidad de difundir la cura a un vasto n�mero de personas y, como perspectiva, a todos. El problema principal radica sobretodo en la dificultad de implementar, en sistemas sanitarios de recursos limitados como los africanos, la compleja asistencia necesaria para la infecci�n de HIV/SIDA. Es necesario construir un camino innovador en este campo, teniendo en cuenta los peculiares factores y suscitando la necesidad de estructuras �giles y ligeras. Hoy DREAM se presenta como modelo que funciona que debe afrontar el reto de su crecimiento. Se trata de ampliar y dilatar, juntos, todos los aspectos del sistema: desde la formaci�n del personal t�cnico y m�dico (en un pa�s- como gran parte de los pa�ses del �frica subsahariana con una cr�nica carencia de personal agravada por la pandemia) a la creaci�n de adecuadas infraestructuras, desde la facilidad de diagn�stico a una adecuada asistencia al parto, desde la monitorizaci�n y supervisi�n de las terapias a la valoraci�n de los resultados. El crecimiento coordinado y arm�nico de los diferentes componentes representa un pasaje cr�tico que pide y pedir� un compromiso excepcional. Por lo dem�s, la lucha contra el SIDA debe afrontar este ineludible tr�nsito a gran escala de las curas para aspirar a convertirse en batalla en todo el pa�s, y en un futuro, modelo para pa�ses de recursos limitados. No se puede, en efecto, ofrecer todo a todos al mismo tiempo, lo que impone elecciones de prioridad. Por eso, en la primera fase se ha dado prioridad con DREAM a las mujeres embarazadas, a la pareja madre-ni�o y a algunas intervenciones clave en sectores estrat�gicos del desarrollo como el sanitario (m�dicos, enfermeros y personal auxiliar) y educativo (profesores de la escuela obligatoria). A los responsables del programa se les ha preguntado varias veces si es �tico o no privilegiar una franja de poblaci�n sobre otra. La situaci�n de partida, desgraciadamente, en gran parte de �frica es la de no elecci�n acompa�ada de inmovilidad, impotencia y total resignaci�n ante la expansi�n de la epidemia.
No elegir para evitar el riesgo de elecciones de prioridades necesarias al inicio de cualquier programa con ambici�n global (como la contenci�n, el contraste y la derrota del SIDA en �frica), es realmente el contrario del riesgo �tico, en una especie de limbo �tico que se hace responsable de la desaparici�n de enteras generaciones.
DREAM no olvida otros sectores de poblaci�n que con m�s dificultad tienen acceso a las curas, como por ejemplo los presos de las c�rceles o los ni�os internados. Por dicho motivo se est� difundiendo r�pidamente, tambi�n en sentido geogr�fico, en el centro y norte de Mozambique..

DREAM es un programa de sanidad p�blica

DREAM ha sido concebido para ser un componente estable del Servicio Sanitario Mozambique�o. Sus estructuras, en los hospitales, en los centros de salud y en las maternidades, son las del Servicio Sanitario Mozambique�o. No se excluyen, desde los pr�ximos meses, estructuras privadas -de gran relevancia social y p�blica- gestionadas por congregaciones religiosas, voluntarios, ONG y otras agencias de solidaridad, que ya est�n contribuyendo eficazmente en el scaling-up del programa. Todos los servicios sanitarios, desde el diagn�stico al apoyo nutricional, desde la educaci�n sanitaria a la terapia convencional de infecciones oportunisticas y de infecciones de transmisi�n sexual (como la HAART), se ofrecen en total r�gimen de gratuidad, al menos en lo que respecta a las poblaciones que pertenecen a la cuenca de uso de los centros. Est� en estudio la posibilidad de garantizar el acceso a estos servicios tambi�n para quien est� lejos geogr�ficamente, proponiendo mecanismos de costes compartidos aplicados a los gastos en material, para cubrir los costes, por ejemplo, de reactivos para diagn�sticos.

DREAM es tambi�n investigaci�n operativa

DREAM se usa tambi�n con finalidades de investigaci�n en sanidad p�blica, epidemiolog�a de los servicios y de su impacto, en cl�nica y en la terapia para pa�ses en v�as de desarrollo. La adquisici�n de nuevos conocimientos, en la investigaci�n dedicada a intervenciones de desarrollo en pa�ses pobres, representa una v�lida contribuci�n en el camino de la lucha contra el SIDA. En este sentido el programa est� dotado de fuertes conexiones con el mundo cient�fico y est� orientado a la recogida de datos para estudios epidemiol�gicos, sea en v�a rutinaria que para indagaciones ad hoc. Gran atenci�n se ha otorgado a la necesidad de dar vida -a pesar de las obvias debilidades de infraestructura en un pa�s de grandes dimensiones y con problemas de comunicaci�n unidos a la historia del pa�s y a la salida de la guerra- a un eficiente sistema de comunicaci�n interna. Una red informatizada y telem�tica une todos los centros del pa�s y los conecta a un server en el lugar y en Europa, facilitando el trabajo de coordinaci�n y supervisi�n, permitiendo inmediatas teleconsultas para los cl�nicos de DREAM y proporcionando en tiempo real los datos producidos en cada estructura.

Estas p�ginas se han escrito por dos motivos. El primero es el de dar a conocer de manera sencilla y detallada los primeros pasos y las conquistas de un programa que muestra de manera convincente - a contracorriente- que es posible derrotar el SIDA en �frica. El segundo es que DREAM quiere ser un canal abierto para quien quiere participar en esta cautivadora batalla pero no tiene medios, un colector de energ�as y recursos para todo �frica. DREAM en efecto - es su �ltima caracter�stica - nos necesita a todos y se pone a disposici�n de quien cree poder extenderlo en otras situaciones de lucha contra el SIDA en �frica.
Derrotar el SIDA es posible. Creemos que ser conscientes de ello puede crear un contagio positivo entre aquellos que tienen la posibilidad de multiplicar la eficacia de esta batalla decisiva para el futuro de �frica y del planeta.
El apoyo de muchos permite crecer mejor y m�s r�pido. Y el tiempo, contra el SIDA, es decisivo.

DREAM funciona desde hace m�s de un a�o y los primeros resultados han sido presentados en la 10� Conferencia CROI (Conference on Retroviruses and Opportunistic Infections - Boston 2003).