Comunità di S.Egidio


 

01/10/2005


La batalla contra el sida contin�a en �frica. La Comunidad de San Egidio extiende a varios pa�ses africanos el proyecto DREAM

 

La Comunidad de San Egidio sigue so�ando en �frica. Su �ltimo sue�o es la lucha contra el sida, posiblemente la peor y m�s sangrienta de las guerras que azota al continente africano. Una guerra ante la cual, desde las grandes agencias internacionales, hasta ahora s�lo se hab�a luchado con la prevenci�n. San Egidio ha puesto en escena un nuevo y revolucionario �armamento�, el proyecto DREAM, que conjuga prevenci�n con terapia, devolviendo as� la esperanza para aquellas personas que ya han sido infectadas por el virus, casi 30 millones en todo el continente. San Egidio quiere demostrar que los pa�ses pobres tambi�n pueden combatir la epidemia y tras casi tres a�os de proyecto se empieza a so�ar con un futuro mejor para �frica.

Para la Comunidad de San Egidio las personas no son nunca una simple emergencia. No son simples cuerpos que vestir, heridas que curar o est�magos que alimentar... Son siempre personas, son amigos. Esta convicci�n profunda les llev� a embarcarse en el a�o 2001 en una esperanzada aventura sin retorno, la de la lucha contra el sida en �frica. El objetivo no era s�lo prevenir, sino tambi�n curar, hacer posible una vida digna a pesar de ser seropositivo, algo que por entonces no era posible en �frica. El programa DREAM �sue�o, en ingl�s� ha atendido ya a m�s de 7.000 personas en Mozambique, de las cuales 3.000 han recibido asistencia y terapia con antirretrovirales. Es el mayor n�mero de personas �curadas� en el continente m�s aquejado por la epidemia.

Este revolucionario programa de control, prevenci�n y tratamiento del VIH se ha convertido en los �ltimos a�os en el modelo m�s eficaz de intervenci�n para garantizar el acceso gratuito a la terapia en �frica subsahariana, con costes organizativos y gesti�n compatibles, estructuras ligeras, que a la vez que atacan los efectos del sida combaten contra la degradaci�n ambiental, tuberculosis y malnutrici�n.

El sue�o parece que se ha hecho realidad. La lucha contra el sida tambi�n es posible en �frica. En los �ltimos meses varios pa�ses han llamado a las puertas de la comunidad con el objetivo de implantar el programa DREAM fuera de Mozambique. Nace as� una gran esperanza para un continente en el que ya hay 30 millones de personas infectadas por el sida.

Desde que el proyecto DREAM se iniciara en �frica los resultados no han hecho m�s que confirmar las grandes esperanzas puestas en �l. El 97% de los ni�os nacen sanos de madres seropositivas tratadas con triterapia a partir del segundo trimestre de embarazo. Al mismo tiempo existe un 90% de supervivencia y de vuelta a las actividades ordinarias de la vida cotidiana para las personas con sida sometidas a terapia, y un 95% de adhesi�n a la terapia, una cifra superior a la de Europa y Norteam�rica para personas que asumen antirretrovirales. Con estas cifras, no s�lo se est� reduciendo la mortalidad y mejorando la calidad de vida, sino que se est� demostrando que la terapia tambi�n puede funcionar en �frica, algo de lo que se dudaba hasta ahora. �Hemos empezado a so�ar que podemos vencer en la batalla contra el sida�, aseguran desde la Comunidad de San Egidio. Todo son razones para seguir trabajando y extender el programa a otros centros y pa�ses. Se espera que en los pr�ximos a�os, DREAM pueda llegar a m�s de 30.000 seropositivos.

Transmisi�n de madre a hijo

Una de las prioridades del proyecto ha sido desde sus inicios las madres embarazadas. En ellas se est� jugando el futuro del pa�s y del continente. Viudas mayoritariamente a causa de la epidemia, ellas constituyen el aut�ntico pilar de la familia africana. El objetivo de DREAM es por un lado, evitar la transmisi�n de madres a hijos del VIH, y por otro, la curaci�n de �stas, sin las cuales los hijos dif�cilmente tendr�an futuro. De esta manera se corta la epidemia de ra�z, se impide que el beb� nazca infectado y se puede salvar toda una familia. Para San Egidio, �la mejor manera de evitar que una mujer transmita el sida a su hijo no es alejarla de �l, sino curarla�.

Al mismo tiempo que se trata a las madres con la triterapia, para la cual antes han de pasar �y no siempre es f�cil� el test del sida, se les ofrece tambi�n un seguimiento y un control exhaustivo, educaci�n sanitaria y suplementos nutricionales. San Egidio, en un acompa�amiento personalizado que no tiene precio, se preocupa hasta de los m�s m�nimos detalles: leche artificial, filtro de agua, mosquitera...El programa es muy completo, no s�lo m�dicamente sino tambi�n en el aspecto humano. El trato es casi familiar, respetando mucho la intimidad de cada paciente, ofreciendo espacios �alegres�, donde las personas puedan encontrarse a gusto y luchar con valent�a por un futuro mejor. Se habla con ellas, se las aconseja, y en el caso de que est�n enfermas se las invita a entrar gratuitamente en el programa DREAM.

Las infraestructuras son sencillas, pero pr�cticas y muy eficaces. La comunidad gestiona varios centros en Mozambique, tanto en la capital Maputo, como en Beiras, mientras que otras ONG y entidades hospitalarias ya empiezan a implantar el programa en otros lugares. El programa DREAM tambi�n prev� las visitas a domicilio, fundamentales para aquellas personas con la enfermedad m�s avanzada. Al mismo tiempo cuenta con centros de diagn�stico y laboratorios de biolog�a molecular. De esta manera, la Comunidad de San Egidio demuestra que con pocas infraestructuras, pero bien gestionadas, se puede atacar la enfermedad.

Adem�s de las mujeres y los ni�os, tambi�n se les presta especial atenci�n, aunque no exclusivamente, a aquellos sectores de poblaci�n determinantes para el futuro del pa�s: m�dicos, profesores, enfermeras... El deseo, sin embargo, es que en breve el tratamiento antirretroviral est� al alcance de toda la poblaci�n.

En los �ltimos tiempos, la Comunidad de San Egidio ha coordinado varios cursos para personal sanitario sobre el programa DREAM. M�dicos y enfermeras de Malawi, Angola, Tanzania o Guinea Bissau, entre otros, se han desplazado a Mozambique para interesarse y para implantar el proyecto en sus respectivos pa�ses. Con DREAM, se les ha abierto una puerta a la vida�