HAY QUIEN TIENE HAMBRE
La falta de
alimentos es uno de los aspectos m�s dram�ticos de la pobreza. Tambi�n en las grandes y
ricas ciudades europeas es cada vez m�s f�cil ver a personas que hurgan en los
contenedores de basura para encontrar comida.
El problema no
afecta s�lo a quien vive en la calle: no son pocos, por ejemplo, los ancianos a los que
no basta la pensi�n para cubrir todos los gastos necesarios o las familias en dificultad,
con ingresos escasos o nulos, que se dirigen con asiduidad a los centros de asistencia. .
Para luchar
contra las dif�ciles condiciones de estas personas, la Comunidad recoge alimentos en los
supermercados, en centros de trabajo, en las escuelas, en industrias de alimentos para
distribuirlos en los centros de acogida. Por ejemplo, en el a�o 2000 se distribuyeron en
Roma cerca de 200 toneladas de alimentos (aceite, pasta, arroz, legumbres, conservas,
galletas y alimentos para ni�os, etc).
Los g�neros
alimentarios tambi�n son enviados a varios pa�ses - por ejemplo a Albania a los
pr�fugos kosovares durante el �ltimo conflicto - junto a otras ayudas de primera
necesidad. |