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En Uganda las inscripciones en el registro civil son el signo de una época de paz para una nueva generación
3 de marzo de 2010
El mes de febrero, las Comunidades de Sant’Egidio de Adjumani y Moyo, dos localidades del norte de Uganda, empezaron la campaña de inscripción en el registro civil de los niños de la Escuela de la Paz.
Tras una guerra civil que duraba ya más de veinte años, el norte de Uganda no ha podido vivir una cierta estabilidad y seguridad hasta hace muy poco. Un alto número de niños han quedado huérfanos a causa de la guerra y nunca fueron inscritos en el registro civil. Son niños que “no existen”.
Como signo concreto de protección y ayuda a una nueva generación, que finalmente tras veinte años de conflicto conoce la paz, la Comunidad de Sant’Egidio, en el ámbito del programa Bravo! ha trabajado para que los niños y adolescentes pudieran estar inscritos en el registro civil. Después de un trabajo preciso de recopilación de los datos de nacimiento y de las familias de los niños, fueron presentadas a las oficinas administrativas competentes las peticiones de los primeros 138 certificados. Y cuando terminaron los trámites, ¡finalmente llegaron! Se organizó una gran fiesta para la entrega del certificado a cada niño.
Los niños estaban muy felices y orgullosos de “existir”. Recogieron su precioso documento entre cantos y aplausos. Ahora sus nombres están custodiados con diligencia y ya nunca más serán niños "invisibles". Ahora podrán terminar sus estudios, y, quién sabe, incluso ir al a Universidad. Un futuro nuevo se ha abierto para los primeros 138 niños.
Pero muchos otros le seguirán…
La Comunidad de Sant’Egidio en el norte de Uganda y el trabajo por la paz
Tras veinte años de guerra civil, millones de prófugos y muchas vícitmas civiles, el 29 de junio de 2007, en Juba, se firmaba el tercer protocolo del proceso de paz para el norte de Uganda, entre el Gobierno ugandés y la guerrilla de la Lord's Resistance Army (LRA). Se trató de un acuerdo para el cese de las hostilidades entre el gobierno ugandés y los rebeldes de la LRA. El documento, fruto de las negociaciones de Juba, en el sur de Sudán, se aprobó gracias, entre otras, a la mediación de la Comunidad de Sant'Egidio. Era el primer paso hacia una paz duradera.
Como es bien sabido, el conflicto del norte de Uganda ha sido uno de los más violentos y sangrientos del continente africano. Hoy el conflicto ha parado, pero las heridas que dejó la guerra, sobre todo entre los niños, todavía son muy profundas.
Las "Escuelas de la Paz”, presentes en varias localidades del norte de Uganda son centros totalmente gratuitos gestionados a título voluntario por miembros de la Comunidad de Sant'Egidio a los que acuden cientos de niños y adolescentes que la guerra civil y sus consecuencias ha hecho especialmente vulnerables. Son escuelas donde, además de la alfabetización, se aprende a vivir juntos en paz y amistad.
Las "Escuelas de la Paz” de Adjumani y Moyo tienen desde 2002 una atención especial por los huérfanos y los niños secuestrados durante los ataques rebeldes, que ahora vuelven a sus pueblos. Se ha reconstruido un tejido social y familiar para su retorno a casa, se les ofrece la posibilidad de volver a la escuela y de acceder a atención sanitaria. Muchos de los jóvenes que han pasado por este programa ahora se prestan de manera voluntaria en la “Escuela de la Paz” para ayudar a los niños.
