Hoy 27 de diciembre, el papa Benedicto XVI ha visitado el comedor para los pobres de la Comunidad de Sant'Egidio. Lo recibieron en la puerta del comedor de Via Dandolo, 10, Andrea Riccardi, Marco Impagliazzo, monseñor Vincenzo Paglia, junto con una mujer rom y un inmigrante senegalés.
En el pasillo de entrada, el Santo Padre saludó a una representación de voluntarios que normalmente sirven en el comedor y algunos responsables de la Comunidad.
Luego Andrea Riccardi mostró al Santo Padre el monumento que narra la historia de Modesta Valenti, una mujer sin techo que murió sin ayuda en la Estación Termini de Roma y que se ha convertido en el símbolo de las personas que mueren por la calle.
Benedicto XVI entró en la sala del comedor donde comió. Le esperaban en dos salas 150 invitados. El Papa, antes de sentarse a la mesa con 12 comensales, pasó por las dos salas para conocer personalmente a cada uno de los invitados.
Antes de empezar la comida Andrea Riccardi dirigió unas palabras de saludo y de bienvenida a Benedicto XVI (Texto>>>).
La comida, con un menú navideño, empezó con: aperitivo, lasaña, albóndigas, lentejas y puré. Al finalizar la comida: postres y brindis con champán. Los postres fueron ofrecidos por el Santo Padre.
Al finalizar la comida, el Papa entregó personalmente regalos a los 31 niños presentes.
A continuación el Papa pronunció su discurso:
“A través de gestos de amor de los que siguen a Jesús se hace visible la verdad de que Dios nos amó primero y continúa amándonos primero; por eso también nosotros podemos contestar con el amor (Enc. Deus caritas est, 17). Jesús dice: 'tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y me acogisteis; estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y acudisteis a mí' (Mt 25, 35-36). Y concluye: 'cuanto hicisteis a uno de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis' (25, 40). Escuchando estas palabras, ¿cómo no sentirse realmente de aquellos en los que el Señor se reconoce? Y no sólo amigos, sino también familiares.
Queridos amigos Es para mí una experiencia conmovedora estar con vosotros, estar aquí en la familia de Sant'Egidio, estar con los amigos de Jesús porque Jesús ama precisamente a las personas que sufren, a las personas con dificultades y quiere tenerlos como sus hermanos y hermanas. Durante la comida, he escuchado historias dolorosas y cargadas de humanidad, también la historia de un amor encontrado aquí: historias de ancianos, emigrantes, gente sin casa, gitanos, discapacitados, personas con problemas económicos u otras dificultades, todos, de un modo u otro, castigados por la vida. Estoty aquí entre vosotros para deciros que me siento cerca de vosotros y os quiero.
He venido entre vosotros en la Fiesta de la Sagrada Familia porque de algún modo se parece a vosotros:
También la familia de Jesús, desde sus primeros pasos, encontró dificultades, vivió la incomodidad de no encontrar hospitalidad, se vio obligada a emigrar a Egipto por la violencia del rey Herodes. Vosotros conocéis el sufrimiento pero tenéis aquí a alguien que se ocupa de vosotros, aún más, a alguien que ha encontrado aquí a su familia gracias al servicio atento de la Comunidad de Sant'Egidio, que ofrece un signo del amor de Dios por los pobres. Aquí hoy se hace realidad lo que pasa en casa: el que sirve y ayuda se confunde con el que es ayudado y servido, y el primer lugar lo ocupa aquel que más necesidad tiene." El texto íntegro en vatican.va
Posteriormente fue al piso superior, a la Biblioteca de la escuela de lengua italiana de la Comunidad de Sant'Egidio, donde conoció a 26 inmigrantes de otros tantos países con algunos profesores.
El Papa descubrió una placa conmemorativa de la visita y al salir saludó a las personas que estaban fuera..
Algunas notas sobre los invitados sentados a la mesa del Santo Padre Benedicto XVI (it)
El comedor para los pobres (it)
Comedor de Via Dandolo. Un poco de historia y actividades (it) |