Era el 6 de julio de 1964 cuando el Nyasaland, entonces colonia inglesa, se convirtió en un país independiente y tomó el nombre de Malawi. Durante 30 años, desde el día de la independencia, Malawi ha vivido un largo y atormentado camino de acercamiento a la democracia, que culminó en 1994 con las primeras elecciones democráticas en las que participaron por primera vez varios partidos. La visita del fundador de la Comunidad de Sant'Egidio Andrea Riccardi, coincidiendo con el cincuentenario de la independencia, fue una ocasión para reflexionar sobre el futuro del pequeño país africano, empezando por los acontecimientos históricos más significativos de su historia.

La Comunidad está en Malawi desde 1999. En estos quince años se ha difundido por pueblos y ciudades y actualmente es una red de solidaridad y de ayuda en la que participan más de diez mil personas. En Malawi la mayor parte de la población está formada por jóvenes que todavía no tienen 25 años. Por otra parte, la escolarización sigue siendo muy baja e insuficiente. Las perspectivas de educación y trabajo siguen siendo de las más bajas de África. En este contexto el movimiento de los Jóvenes por la Paz de la Comunidad de Sant'Egidio, que empezó hace algunos años, ha representado una propuesta y una perspectiva de futuro para muchos jóvenes de Malawi. El movimiento, con más de 3.000 estudiantes de las escuelas superiores, celebró el pasado mes de abril su primer Congreso Nacional.

Hay muchos signos de esperanza que ayudan a mirar con confianza el futuro de aquel país: el programa DREAM con sus 18.000 enfermos de sida que siguen actualmente el tratamiento, y la amistad con muchos ancianos que se hace cada vez más capilar y llega incluso a los ancianos de los pueblos más aislados.

Andrea Riccardi se reunió, en Blantyre, con las delegaciones de las 150 Comunidades del país y participó en la liturgia de acción de gracias por los cincuenta años de paz en Malawi, que Sant'Egidio celebró el 6 de julio, día de la independencia. También fue la ocasión para visitar el lugar donde se erigirá pronto la sede de la Comunidad de Blantyre. En los cincuenta años del Malawi independiente, el camino de quince años de Sant'Egidio representa una parte importante y significativa de la historia de la antigua colonia británica.