Se refuerza la paz en el sur de Filipinas. Hoy, en Mindanao, con una solemne ceremonia, un primer grupo de combatientes del FMLI (Frente Moro de Liberación Islámico) entrega simbólicamente las armas para escenificar la definitiva transformación en fuerza política del principal actor de la guerrilla.
Es un significativo avance en la normalización que empezó con la firma de la paz en Manila el 27 de marzo de 2015, que puso fin a una larga y sangrienta guerra civil y activó un proceso de reconocimiento de la región autónoma de Bangsamoro.
La Comunidad de Sant’Egidio, que, como miembro del Grupo de Contacto de las negociaciones de paz, acompaña desde hace unos años este proceso, manifiesta su alegría y confirma su compromiso para favorecer la implementación del proceso de paz en la sociedad civil y entre las instituciones, continuando en su trabajo por el diálogo interreligioso y la reconciliación. |