El 31 de diciembre en la ciudad de Cali (Colombia) alguien distribuyó un dulce de navidad a la gente que vive en la calle.  Pero la "natilla" contenía pesticida y polvo de cristal. En la madrugada del 1 de enero, 43 personas sin hogar fueron hospitalizadas, dos han muerto y algunas de ellas todavía están en una situación desesperada, entre la vida y la muerte.

La Comunidad de Sant'Egidio de Cali, después de llevar a los hospitalizados su solidaridad, ha realizado una invitación para reunirse en oración en el santuario de la ciudad, la "Loma San Antonio", el 3 de enero, expresando el dolor por este terrible acto de violencia.

Las autoridades de la ciudad no descartan que la comida envenenada la hayan distribuido los llamados "grupos de limpieza social". Durante los últimos meses han ocurrido una serie de agresiones hacia los más pobres de la ciudad de Cali. Hace unos meses, tres jóvenes que vivían en la calle fueron secuestrados y sus cuerpos se encontraron sin vida.