Un acuerdo entre el Instituto Italo Latino Americano (IILA) y la Comunidad de San Egidio fue firmado este jueves en Roma destinado a la paz y cooperación en América Latina y el Caribe.
El acuerdo fue suscrito en la sede del IILA, ente gubernamental que reúne a Italia y 20 países de América Latina, por su secretario general, Giorgio Malfatti y el presidente de San Egidio, Marco Impagliazzo.
Como testigos de honor, estaban presentes el ministro de Relaciones Exteriores de Italia, Franco Fattini y el secretario de la Pontificia Comisión para América Latina, el uruguayo Guzmán Carriquiry Lecour, además de diversos embajadores de la región.
En concreto San Egidio recibirá 150.000 euros en el lapso de tres años, que serán destinados a la creación de un trabajo de cooperación social en Cuba, en donde la Comunidad tiene un espacio concedido por el Estado cubano en el centro histórico de La Habana, en donde desarrolla un programa para los ancianos pobres.
El ministro Frattini recordó la necesidad de globalizar la solidaridad y de la importancia de la persona humana, sea en la economía que en las políticas de desarrollo y cooperación.
Y de que el Ministerio de Exteriores de Italia “ha hecho y hará de esta colaboración una ocasión para reafirmar a través de la Cooperación Italiana algunos valores destinados a reforzar la persona humana”.
Contrariamente dijo “corremos el riesgo de desviar las opciones de política de Exterior basándonos en un criterio solamente de interés, respetable pero no suficiente en un mundo en el que la crisis financiera y los desafíos globales están delante de nosotros”.
Concluida la ceremonia, el ministro Frattini indicó a ZENIT que “la Caritas in Veritate es un documento que muchos deberían leer con atención”. Y añadió: “Yo creo que en un mundo globalizado si no hay un verdadero humanismo se acaba pensando que el mundo está basado solamente sobre el PIB, cuando en realidad está fundado sobre hombres y mujeres”.
Precisó que “sobre ésto nos debemos preocupar”, contrariamente se corre el riesgo que “la política exterior como la política europea se vuelvan áridas y no lleguen al corazón de la gente. Este es el mensaje que aprendemos del Papa y no solamente de dicha encíclica”.
El presidente de San Egidio entrevistado por ZENIT indicó la importancia del acuerdo, y de como una contribución de la Cooperación de poco más de 4.000 euros mensuales logren dar frutos en un vasto trabajo social gracias al trabajo de los voluntarios.
- Hoy se firmó un acuerdo marco y un proyecto concreto ¿Qué alcance tiene?
Impagliazzo. El acuerdo significa para San Egidio, entrar más en contacto con América Latina, y echar raíces de amistad aún más sólidas partiendo desde Cuba. Este proyecto apoya particularmente la acción que realizamos en Cuba, con niños y ancianos.
Pero también es un reconocimiento muy importante de nuestro trabajo gratuito y voluntario por parte de muchos Estados e instituciones latinoamericanas. Creo que esta sinergía podrá dar grandes frutos como ya están iniciando a darlos en todo el continente.
- ¿En concreto hay una ayuda económica de Italia?
Impagliazzo. Son 50.000 euros por tres años, o sea en total 150.000, fondos de la Cooperación Italiana que pasan por el Instituto Italo Latino Americano, que terminarán directamente en el trabajo social de la comunidad de San Egidio en Cuba.
- Un ente gubernamental con aquella cantidad no lograría hacer mucho. San Egidio o digamos una Ong en general logran producir mucho con dicha, digamos ‘inversión’.
Impagliazzo. Particularmente la Comunidad de San Egidio considera mucho la palabra ‘gratuidad’. Nuestro trabajo se basa en los voluntarios. Por lo tanto pocos recursos económicos que recibamos pueden rendir mucho.
Esto en colaboración con muchos hombres, mujeres y jóvenes de San Egidio que son latinoamericanos. Hay también una conciencia muy profunda de la realidad de los países, pues la verdadera inculturación es ser hijos de aquellos países.
- Más allá del proyecto en Cuba, ¿el acuerdo les da una acreditación mayor hacia los países que integran el IILA?
Impagliazzo. Pienso que nuestro empeño en los próximos años se deberá centrar en enfrentar el tema de la violencia juvenil. Sacar a los niños de la calle, evitar que entren en las gang, en las maras, en las bandas juveniles. Éste trabajo lo estamos haciendo con particular empeño en América Central y allí nos concentraremos en los próximos años.
Además porque allí tuvimos un mártir, William Quijano, un joven de 21 años que era responsable de una de nuestras escuelas de paz, porque justamente ayudaba a los niños a salvarse de la violencia. La muerte de William la sentimos como un empeño importante para seguir su camino.
- La próxima JMJ será en Brasil y probablemente irá Benedicto XVI ¿Qué significado ve en ésto?
Impagliazzo. El hecho que el Papa haya decidido que la próxima Jornada Mundial de la Juventud se realizará en Brasil es un signo importantísimo de la predilección de la Iglesia por Brasil y el continente latinoamericano que es un continente católico pero que vive aún muchas contradicciones y del crecimiento de sectas y movimientos pentecostales. Y aquí es necesario de reforzar la fe, particularmente en los jóvenes.
Por lo cual la eventual visita del Papa y que allí se realice la JMJ dará gran empuje a la Iglesia en América Latina en los próximos años.