"Existe un criterio para saber si Dios está cerca o lejos de nosotros: todo aquel que se preocupe del hambriento, de quien está desnudo, del pobre, del desaparecido, del torturado, del preso, de toda esta carne que sufre, tiene a Dios cerca de él".
Con estas palabras monseñor Óscar Arnulfo romero empezó la homilía del padre Jesús Delgado, que fue su secretario y que en estos años ha conservado incansablemente el recuerdo del obispo mártir, con el apoyo, como él mismo ha querido recordar, de la Comunidad de Sant'Egidio y de monseñor Vincenzo Paglia, actualmente presidente del Pontificio Consejo para la Familia, postulador de la causa de beatificación.
Fue una oración alegre en la que participaron un numeroso pueblo y unos cien obispos de todo el mundo, amigos de Sant'Egidio, reunidos en estos días en Roma para asistir al congreso "Un pueblo profético para un nuevo humanismo". |