Ucrania, Siria, Irak, Gaza... Son muchos los lugares atormentados por la guerra y cuyos nombres se recordaron en la basílica de la Natividad, justo al lado del lugar donde nació Jesús en Belén. Allí un grupo de pelegrinos de la Comunidad de Sant'Egidio junto a jóvenes de Belén hizo la oración por la paz.
Tras recordar los nombres de los países en guerra y de las numerosas situaciones de violencia que están provocando muerte y dolor, una procesión emocionada y silenciosa "encendió" una luz por cada país recordado en la oración, hasta formar la palabra "Peace", para indicar nuestra esperanza de paz.
Los jóvenes y los responsables franciscanos de la parroquia de la Natividad continuarán orando, en comunión con las comunidades de Sant'Egidio del mundo, una vez al mes por la paz.
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