Hace unos días una delegación de la Comunidad de Sant’Egidio estuvo en la República Popular Democrática de Corea para llevar ayuda alimentaria. Se trata de un primer envío de productos alimentarios al país, en el ámbito de un programa de lucha contra la malnutrición.

La ayuda se ha hecho necesaria a causa de la difícil situación del país asiático, que se ha agravado por la sequía y por la escasez de las cosechas. La insuficiencia alimentaria afecta a las franjas débiles de la población, en especial a los niños y los ancianos.

Las ayudas, unas 26 toneladas de arroz, aceite, azúcar y frijoles, fueron entregadas en el distrito de Pyongyang y garantizarán un suplemento nutricional para los ancianos de dos residencias y para los niños de un orfanato del sur de la capital.