Una abarrotada basílica de Santa Maria in Trastevere acogió ayer por la tarde la oración de la Comunidad de Sant'Egidio por la paz y para recordar a las víctimas de los ataques de París. Una muchedumbre de hombres, mujeres y también niños de distintas procedencias geográficas, culturales y religiosas manifestó su cercanía al pueblo francés, representado durante la ceremonia por la embajadora de Francia en Italia, Catherine Colonna, y por representantes de la Embajada francesa ante la Santa Sede.
En la oración, presidida por monseñor Vincenzo Paglia, participaron en representación del Gobierno italiano la ministra de Reformas Constitucionales, Maria Elena Boschi, y el subsecretario de Exteriores, Mario Giro. Entre los presentes había también muchos musulmanes, que quisieron manifestar su dolor y su solidaridad, al tiempo que querían afirmar su radical disociación de las religiones de cualquier acto de violencia y rezar juntos al Dios de la paz.
En su predicación, el obispo Paglia expresó todo el dolor por los ataques de París, y recordó la solidaridad, la conmoción y las oraciones que se han elevado en todo el mundo por las víctimas: "No faltan señales de resistencia al mal, de solidaridad entre los creyentes, de acogida a los más débiles. Son las señales de un mundo nuevo posible. Estamos llamados a reconocerlas y a sostenerlas".
La oración terminó encendiendo las velas de la paz, que primero en la basílica y luego fuera en la plaza iluminaron Trastevere, que por una tarde se paró a orar por la paz y el fin de toda violencia.
La predicación de Vincenzo Paglia (IT)
Galería de fotos |