Hoy se ha celebrado el primer año de corredores humanitarios con la bienvenida a 50 nuevos refugiados sirios, a los que se sumarán 75 más el próximo 2 de marzo, gracias al proyecto impulsado por la Comunidad de Sant’Egidio, la Federación de Iglesias Evangélicas de Italia y la Mesa Valdense. Con esta nueva llegada asciende a casi 700 el número de personas que han llegado de manera segura y legal a Italia desde que empezó esta iniciativa el 29 de febrero de 2016. Todas ellas han llegado de manera segura y legal a Italia gracias a un acuerdo con los ministerios de Exteriores y del Interior.

Han recibido a las familias sirias, que han llegado desde Beirut con un vuelo de Alitalia, el fundador de la Comunidad de Sant’Egidio, Andrea Riccardi, el presidente de la Federación de Iglesias Evangélicas de Italia, Luca Maria Negro, la responsable de la oficina del Ocho por mil de la Mesa Valdense, Susanna Pietra, la responsable de los servicios a los migrantes de la Comunidad de Sant’Egidio, Daniela Pompei, el viceministro de Exteriores, Mario Giro, y el subsecretario de Interior, Domenico Manzione.

Según Riccardi "la sociedad italiana siente simpatía por Siria". "En un año de trabajo, que ha permitido que lleguen a Italia un número significativo de refugiados de manera segura y fomentando su integración –añadió el fundador de Sant'Egidio–, hemos comprendido el deseo de muchos ciudadanos de acoger. Europa no está condenada a afrontar la inmigración con miedo o con demagogia. Y los muros solo son un paliativo. Lo demuestra que otros países europeos estén a punto de abrir nuevos corredores humanitarios: Francia lo hará seguramente antes de terminar el mes de marzo".

"Lo que parecía un sueño se ha hecho realidad y ya cumple un año", ha dicho Luca Maria Negro, que ha dado las gracias a todos aquellos que en Italia están trabajando por la integración. Las nuevas familias sirias serán acogidas –como ha pasado con la llegada de otros grupos anteriormente– por comunidades, parroquias, asociaciones y familias en varias regiones italianas, entre las que estará, por primera vez, la isla de la Magdalena, en Cerdeña. 68 municipios de 17 regiones de Italia han ofrecido su hospitalidad a los refugiados.

Otros 300 llegarán antes de finalizar el año, mientras que 500, en gran parte eritreos, somalíes y sudsudaneses, llegarán provenientes de Etiopía gracias a un acuerdo con el Estado italiano, impulsado por la Comunidad de Sant’Egidio junto a la Conferencia episcopal italiana. La acogida difusa es un elemento fundamental de un proyecto totalmente autofinanciado, se está facilitando la inserción de los refugiados en el tejido civil y social del país, en el circuito educativo para los menores y en el laboral para los adultos, lo que representa un gran beneficio para la sociedad.