El domingo 25 de marzo, en una hermosa jornada de sol primaveral, más de mil personas salieron de la casa de Emanuele Artom, joven judío partisano torturado en la cárcel por los nazis en 1944, y llegaron a la sinagoga de Turín.
Las autoridades de la ciudad, de la comunidad judía, y también muchos turineses, junto a la delegación de Gente de Paz, recorrieron en silencio la calle que el joven Emanuele, licenciado poco antes de la promulgación de las leyes raciales de 1938, recorría cada día para enseñar en la Escuela Judía y para ir al Templo.
Una emocionante parada en el patio de la Escuela Judía conmemoró la masacre de Tolosa.
 Al finalizar la marcha, ante la sinagoga, el coro de los niños de la Escuela Media Judía, que lleva el nombre de "Emanuele Artom", recibió a las autoridades y a los testigos. Un largo abrazo de paz cerró el acto y manifestó la convicción de que una alianza nueva reforzará el sentimiento de humanidad de la ciudad.
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