Unidos contra la xenofobia: ese es el mensaje lanzado por las Comunidad de Sant'Egidio de Pretoria y Johanesburgo en Living Together, el encuentro organizado por Sant'Egidio en Pretoria para sensibilizar a la sociedad tras los graves actos violentos xenófobos que se han producido recientemente en varias ciudades sudafricanas, donde se han producido asesinatos de jóvenes cuya única culpa era ser extranjeros provenientes de otros países del continente..
Una auténtica oleada de ataques contra los inmigrantes: linchamientos, saqueo de comercios, viviendas devastadas, miles de personas desplazadas que han tenido que buscar refugio en cuatro campos de refugiados. Las comunidades extranjeras se han convertido en el chivo expiatorio de una violencia que en realidad es síntoma de problemas sociales más profundos..
Cada mes unos 10.000 emigrantes de todo el continente, sobre todo de Mozambique, Malaui, Zambia, Zimbabue y la República Democrática del Congo, llegan a Sudáfrica en busca de un futuro mejor.
Pero hoy muchos de ellos han decidido irse del país, mientras que los que se quedan continúan viviendo con miedo.
Durante el encuentro, Elard Alumando de la Comunidad de Sant'Egidio de Malaui, explicó los peligros de buscar enemigos frente a los problemas económicos y sociales del país: "Si no hubiera emigrantes la sociedad habría buscado otro enemigo, muy probablemente entre los más pobres: los más débiles suelen ser las víctimas".
Empezar de nuevo a partir de los pobres para recomponer un tejido social dividido es el trabajo diario de Sant'Egidio en Sudáfrica, algo que emergió entre los participantes que ilustraron el modelo de las Escuelas de la Paz de la Comunidad, donde niños y adolescentes de varios países crecen juntos, o el reparto de alimentos y ropa a las personas sin hogar, un servicio en el que sudafricanos y personas de varios países trabajan juntos en la amistad con los más pobres: ejemplo de que vivir juntos es posible también en Sudáfrica. |